Santino Cantoni: su pasión y amor por el básquet que lo hizo crecer

 

El deporte en Gualeguay tiene en Santino Cantoni una de sus jóvenes promesas del básquet. Con solo 17 años, este talentoso jugador se ha convertido en una pieza clave dentro del Club BH, una institución que, según él mismo, es mucho más que un equipo: es una familia.
Desde hace más de una década, Santino se ha dedicado al deporte con pasión. «Juego hace 10 u 11 años», recuerda. Sus inicios estuvieron marcados por la duda entre el fútbol y el básquet, pero finalmente se decidió por la pelota naranja. «Empecé con fútbol, hice las dos cosas a la vez un tiempo y me decidí por el básquet», cuenta.
La elección del Club BH no fue casualidad. «La familia de mi mamá siempre formó parte del club», comenta. Ese sentido de pertenencia lo ha mantenido firme en su camino deportivo, al igual que el legado de su familia: su abuelo paterno fue jugador de fútbol, mientras que el materno se destacó en el básquet.
Si bien no recuerda un momento exacto que lo haya marcado en sus primeros entrenamientos, Santino destaca el ambiente que siempre encontró en el club: «Me gustó todo al entrenarlo, y además, el buen ambiente que había en el club». Hoy, su objetivo es claro: «Poder llegar a ganarme mi lugar en la primera del club y llegar lo más lejos que pueda».
La inspiración para seguir adelante la encuentra en su entorno: «Ver cómo trabaja la gente de BH para sacarlo adelante me motiva a esforzarme más en cada partido». En la cancha, su mentalidad es clara: «Cuando salgo a jugar no pienso en nada en particular, solo trato de estar concentrado en las cosas que pasan en la cancha y estar atento para ayudar a mis compañeros».
El apoyo de su familia ha sido fundamental en su camino. «Mi familia me acompaña y me apoya, y después de los partidos, cuando llego a casa, solemos charlar sobre algunas jugadas y sobre cómo me sentí en el juego».
Pero Santino no solo tiene ambiciones deportivas. El año pasado terminó la escuela secundaria en la Escuela Normal Superior en Lenguas Vivas «Ernesto Alejandro Bavio» y eligió la carrera de Contador Público para continuar sus estudios. «Aunque no soy fanático de estudiar, casi nunca me llevé materias», admite con humildad. A pesar de esto, siempre recibió el apoyo de su familia sin presiones. «Mis padres nunca me presionaron con los estudios y siempre les gustó que haga deporte».
A la hora de celebrar sus logros, Santino prefiere la mesura: «Si, a mi vieja, pero es algo más interno entre nosotros, porque no soy muy expresivo y no soy de festejar o gritar mis puntos».
Cuando se proyecta en el futuro, Santino se ve en la primera de BH, sin descuidar sus estudios. «Me gustaría verme jugando en primera y al mismo tiempo estudiando». Y deja un mensaje para los más chicos que sueñan con seguir sus pasos: «Aprovechen cada entrenamiento o partido para aprender de los profes y disfruten de sus compañeros, del club y su gente, que son los que en un futuro los van a alentar en cada partido».
Santino siente a BH como una parte esencial de su vida. «BH es parte de mi día a día, además de ser jugador, soy un hincha más. Mucha de la gente que forma parte del club está desde que comencé, así que he compartido mucho con ellos. Además, los compañeros que tuve al principio hoy en día son amigos. Todos los que alguna vez pasaron por el club pueden decir que es como una familia».
Y como todo amante del básquet, Santino tiene un ídolo claro: «Aunque me gusten muchos jugadores que miro en la NBA hoy en día, mi favorito es Ginóbili».
Con dedicación, pasión y un fuerte sentido de pertenencia, Santino Cantoni sigue forjando su camino en el básquet, siempre con la vista en el aro y el corazón en su club.